Rammstein en México 6 de diciembre 2010

 

Foto: Bernard Bastien

La espera de nueve años terminó esta noche de lunes, cuando  Rammstein regresó a México para deslumbrar a su público, que ha crecido enormidades en este país albergando a cerca de 18,000 fanáticos haciendo un rotundo sold out.

Llegamos a las 8:00 pm al Palacio de los Deportes, esperando un retraso de una hora como normalmente en cualquiera de los conciertos, pero para nuestra sorpresa, el espectáculo inició solo 15 minutos después de lo acordado. 8:45 que empiece el show!

Esta vez no había banda telonera como se temía puesto que en esta gira Combichrist había abierto los espectáculos de la anda alemana, cosa que no pasaría acá en México

Una manta negra cubría el escenario mientras se escuchaba el intro de “Rammlied”. Sabíamos la canción abridora, lo que desconocíamos era la manera tan espectacular como inició uno de los conciertos más estruendosos, nítidos, y poderosos en cuanto a sonido se refiere.

Al  dejar caer el obscuro telón que cubría el escenario se develó una enorme bandera alemana, que después al ritmo de las primeras estruendosas explosiones habría de dejar a la vista a los integrantes de RAMMSTEIN.

Ahí dio inicio a uno de los mejores conciertos que la audiencia mexicana haya presenciado, lleno de pirotecnia y elementos de escenografía.

“Weisses Fleisch” de su primer disco cuando sólo unos cuantos los conocíamos por su debut en la escena goth, convirtió al Palacio en uno de los mejores antros góticos que la misma Alemania envidiaría.

“Feuer Frei!” como su mismo nombre lo indica, era tiempo de ¡abrir fuego! Y gritar ¡bang bang! Tres ingeniosos sopletes dignos de cualquier estudiante sobresaliente de diseño industrial, escupiendo fuego en las alturas por boca de los dos guitarristas y el maquiavélico Till Linderman. Instantes complicados de narrar por la espectacularidad que ofrecían.

“Fhrulling in Paris” quizás el único momento romántico del concierto. Romántica, desplegando una melancolía brutal. Debió ser uno de los flashbacks más emotivos para la audiencia.

“Mein Teil” fue un oscuro perfomance por parte de Till Linderman, emulando al famoso Caníbal de Rotemburgo;  Restregando fuego en un enorme sartén y vistiendo un delantal color rojo.

“Du Riechst So Gut”, “Links 2-3-4” and “Du Hast” hicieron que volara el Palacio de los Deportes.

“Pussy”, “Ich Will”, “Sonne”, “relajaban” después de la extreme-gore-porn demostración cuando el baterista se acomodó un dildo eyaculando pirotecnia.

“¿quieren Puta?” preguntó el front man de la banda, a lo que los asistentes asintieron gritando “¡puta, puta, puta! dando inicio ala polémica canción.

Podría decirse que fue uno de los mejores conciertos del año, esperamos la experiencia del dia de hoy sea igual o mas grata que la de la fecha del lunes.

Acá el play list del concierto:

Intro

Rammlied

B********

Waidmanns Heil

Weisses Fleisch

Keine Lust

Feuer Frei!

Wiener Blut

Fhruling in Paris

Mein Teil

Du Riechst so Gut

Benzin

Links 2-3-4

Du Hast

Pussy

Sonne

Haifisch

Ich Will

Ich Tu´Dir Weh

Te Quiero Puta